Aromaterapia para bebés y niños.

Repasando mis libros de referencia, y la nueva bibliografia que he ido encontrando estos últimos días buscando información para compartir con un grupo de madres en etapa de crianza, voy a empezar esta entrada con el listado de libros que, recomiendo tener en casa y consultar ante cualquier nuevo caso para el que sea necesario recurrir al uso de los aceites esenciales.


  • ACEITES ESENCIALES para CURAR las PUPAS ( Aceites esenciales en el día a día de la infancia).   de Dominique Baudoux.  COLECCIÓN ACTITUD, Amirys Ediciones.
  • Aceites Esenciales para aromaterapia. Colección LA SALUD EN TUS MANOS, Ed. TIKAL.
  • AROMATERAPIA de la A a la Z. de Patricia Davis. Ed. Edaf.
  • AROMATERAPIA ( Enciclopediade las plantas aromáticas y de sus aceites esenciales)  de Danièle Ryaman. Colección Blibioteca de la Salud. Ed. Kairós
Aunque son mas los libros que he leído y conservo sobre el uso en casa y para hacer terapias con los aceites esenciales, para ser práctica presumo que, con estos cuatro realmente se consigue una fuente increíblemente útil y eficaz para prevenir y resolver con bastante éxito un sinfín de situaciones, y/o desequilibrios de la salud física y emocional desde casa de forma natural y muy respetuosa hacia nuestra persona y familia.  Y obviamente debo añadir que no es necesario comprarlos todos, confío que cada cual usará coherente mente su criterio personal para decidir por cual empezar según su necesidad y deseo.

Dicho esto, voy a describir directamente en un pequeño resumen de mi propia cosecha e inspirado a la vez en algun texto extraído de los libros anteriormente nombrados sobre como usar los aceites esenciales desde casa en las etapas del embarazo, y para los bebés y niños pequeños.

EMBARAZO
Como la etapa extraordinaria y llena de particularidades que es la gestación, escribiré en otro momento otra entrada dedicada exclusivamente a ella, pero así, de forma general diré que, deberíamos dejar a un lado un pequeño grupo de aceites esenciales que nunca deberían utilizarse en los primeros meses de embarazo, sea porque son tóxicos y podrían dañar a la madre y al feto, sea porque implican algún riesgo de aborto. Una vez descartados estos a.e. por supuesto que el uso de técnicas donde se aplica la aromaterapia pueden ser un método seguro y muy beneficioso para el estado general de la mujer embarazada quien puede aliviar las molestias típicas como las náuseas, los dolores de espalda y la hinchazón de piernas y tobillos.

Los a.e. que deben evitarse durante los tres o cuatro primeros meses de embarazo por riesgo de provocar un aborto incluyen los descritos por muchos autores como "emenagogos" esto quiere decir que, inducen el flujo menstrual, y precisamente son éstos los recomendados durante el parto para reforzar las contracciones y por su acción circulatoria. Son los siguientes:
Albahaca, anís, árnica, artemisa, ciprés, enebro, hinojo, hisopo, jazmín, mejorna, menta, mirra, orégano, poleo, romero, rosa, salvia, salvia esclarea, tomillo y wintergreen (gaulteria), además de cualquier otro aceite esencial que se describiera como tóxico en cualquier caso.
* La manzanilla y lavanda también se describen como aceites esenciales emenagogos, pero en este caso su acción es suficientemente leve y sutil como para poder usarlos puntualmente diluidos o en sinergias en dosificaciones muy bajas, si el caso lo requiere, por ejemplo la lavanda para el dolor de cabeza, estado general nervioso, insomnio, o la manzanilla para la piel seca y deshidratada o el sentimiento de aislamiento y falta de apoyo afectivo que puede llegar a sentir en ocasiones la mujer por su alta sensibilidad ante las relaciones y vínculos personales en esta etapa de la vida. Siempre y cuando no haya un riesgo anunciado de posible pérdida, hemorragias, antecedentes de otros abortos, o alguna situación anormal que lleve a la mujer a temer una posible interrupción del embarazo.


BEBÉS
La aromaterapia puede usarse desde los primeros días del bebé - teniendo en cuenta que no todos los aceites serian adecuados, y que no hace falta ponerle los aceites directamente en el cuerpo, ni siquiera en cremas de masaje, champús o otros cosméticos-, ya que se puede beneficiar de la ambientación de la estancia con un aroma sutil desprendido desde un quemador de esencias, o un pulverizador.
Aunque sinceramente creo, que no es para nada necesario.


El único aroma que realmente estimula, calma, equilibra y necesita el bebé es el de su madre. Y dicho esto no me queda más que añadir que, hasta que no tiene un año más o menos, yo no recomiendo usar cosméticos que incluyan sinergias con aceites esenciales a menos que, sea necesario para solucionar algún tema habitual como la irritación del pañal, los granitos anales por la caca ácida en la etapa de la dentición, la tos y los catarros o cualquier infección del sistema respiratorio, los cólicos, la fiebre alta y quizás la dificultad para coger el sueño plácidamente y/o la adaptación a las etapas y cambios que el recién nacido irá descubriendo en su iniciación en esto de "estar en el mundo".
Aunque sí que son muy beneficiosos los masajes con aceites vegetales como por ejemplo con el Oleo macerado de Caléndula, por sus propiedades emolientes ( suavizantes ), y su delicado tacto sobre la fina piel del bebé. Así como el de Almendras, el de Avellanas, el de Aguacate... que elegiremos en funcion veamos lo que necesita la fina piel del bebé, que normalmente no es demasiado pues no ha recibido aun la agresión medioambiental ni el deterioro normal tras el envejecimiento...
Si el aceite de grana vegetal o macerado que elegimos para el masaje de nuestro bebé es de recolección artesanal y de cultivo certificado ecológico mucho mejor!! No olvidemos que los bebes tienden a ponerse los puños en la boca.

En resumen, y para que quede claro, en el primer año de vida preferentemente dejaremos los aceites esenciales para cuando haya un problema a resolver exclusivamente.
Eso no quiere decir que, si nos apetece puntualmente, poner un aroma natural en ambientación en la sala de estar, no lo podamos usar; tampoco quiere decir que como madres no podamos beneficiarnos del uso de la cosmética natural con aceites esenciales, o prepararnos un aceite perfumado que usaremos con precaución de que no lo inhale directamente el bebé evitando ponerlo en las zonas que mas va a rozar.  Y evidentemente que, podemos recibir un masaje terapéutico si es necesario o es de nuestro agrado. 
Otra cosa es que, - tal y como a mí me ha pasado en mis dos maternidades-, simplemente no te apetezca... 
En mi caso mi propio aroma corporal aunque a menudo a leche materna y hormonas aun desajustadas, mezclado con el tierno e indescriptible aroma de mi bebé era lo único que realmente necesitaba y deseaba oler cerca de mi. Pero esta preferencia entra dentro de las características y vivencias de cada una de nosotras, así que, quiero dejar bien claro que, si como mujer deseas usar la aromaterapia en la cosmética y en perfumes durante toda tu maternidad, puedes usarla con total seguridad, siempre y cuando descartes los tóxicos en general, y todos aquellos que están contraindicados expresamente en la infancia o para el bebé.

En segundo descarte, están todos aquellos aceites esenciales que no están contraindicados para los bebés, pero que, tampoco pueden beneficiarse de ninguna de sus aportaciones en ningún nivel (físico, emocional y/o psíquico). Así que nos vamos a quedar con una lista concreta y mínima de aceites realmente útiles para nuestros retoños, pero que son básicos en nuestro botiquín aromático natural.

Los a.e. que usaremos en caso necesario para los bebés son:
Lavanda, Mandarina, Árbol del Te y Manzanilla romana.
Cada uno de ellos por si solo ofrece una gran cantidad de posibilidades para tratar los problemas mas comunes del chiquitín de la casa.  Y usados en sinergia (combinados entre sí), multiplican las posibilidades cubriendo casi cualquier situación típica y común en el primer año de vida.

SIEMPRE USADOS VÍA  TÓPICA (en la piel - excluyendo las mucosas siempre, menos en el caso del muguet para el que si existe una fórmula con aceites esenciales -) Y DILUIDOS EN ACEITES VEGETALES O CREMAS DE FITO TERAPIA en dosificaciones muy bajas.


NIÑOS

Para los bebés de mas de un año ( no hace falta que sea exacto...podemos empezar un poquito antes, o un poco después de su primer cumpleaños, según nos haga falta ), usaremos en el botiquín preventivo y paliativo además de los a.e. ya nombrados de lavanda, mandarina, árbol del te y manzanilla romana, los de espliego machoeucaliptus radiata, la rosa, el palo de rosa, el geranio, el neroli, ranvintsara, palmarosa, el benjuí, la mirra, y a partir de los tres años de edad para casos muy particulares y en sinergia usando después una baja dosificación los de el niauli, el clavo, la menta, tomillo, menta piperita, romero alcánfor,  cedro y canela. 
Éstos últimos, yo particularmente los descarto de entrada, y evito usarlos si no es estrictamente necesario y muy puntualmente para casos extremos y usados localmente y por poco tiempo como seria el cedro y la canela para tratar los sabañones (caso muy raro en un niño tan pequeño).

Los niños precisamente responden muy bien a la aromaterapia y a todas las formas naturales de curación, en parte porque no tienen expectativas pre formadas o prejuicios sobre la cuestión, y en parte porque los cuerpos jóvenes tienen excelentes poderes de recuperación. 

Todos los usos simples de auto ayuda con a.e., como baños, inhalaciones, compresas y pulverizadores, son valiosos para tratar enfermedades infantiles, y evidentemente la práctica del masaje, que sin que sea un tratamiento en si mismo es una gran acción a favor de la prevención por que los aceites esenciales actúan así, desde sus dos formas más eficaces e inocuas:

- Desde la piel
- Desde la inspiración del aroma


Las precauciones de seguridad que debemos tener claras para usar los a.e. en bebés y niños son:

  1. No usar nunca sobre la piel de un niño sin diluir un aceite esencial ( con la única excepción de pequeñas cantidades de a.e. de lavanda o espliego macho sobre quemaduras o heridas superficiales sin sangre ).
  2. Diluir siempre los a.e. antes de echarlos en el agua del baño ( preferentemente en leche de vaca sin desnatar o gel de baño neutro; en segunda opción se pueden diluir en aceites vegetales como por ejemplo el de almendras).
  3. Usar en baño entre 1 y 4 gotas máximo sea qual sea el aroma elegido.
  4. Usar diluciones más bajas que las recomendadas para un adulto al mezclar un a.e. o una mezcla en el aceite para masaje de un niño. ( entre el 1 y el 2 por 100 como máximo)
  5. Evitaremos dejar al niño solo con un recipiente que contiene agua caliente para vaporización, difusión, humidificar o para hacer inhalaciones.
  6. Evitar las inhalaciones directas de los a.e. con componentes contraindicados o dudosos.
  7. NUNCA ADMINISTRAR LOS ACEITES ESENCIALES VÍA ORAL.
  8. Evitar siempre los aceites esenciales tóxicos. (Consultar siempre las propiedades fitoterapeuticas de un aceite esencial y sus contra indicaciones).
  9. No pretender tratar síntomas desconocidos, sin consultar o tener un diagnóstico médico.
  10. En caso de que el niño ingiera por accidente a.e. del tipo que sea, ya fuese en estado puro, mezcla o sinergia, llamar al servicio de toxico logia o asistir lo mas rápido posible al hospital mas cercano.

Bien, como introducción para seguir una precaución correcta antes del uso de los aceites esenciales en los mas pequeños lo dejaré aquí, y prometo para una siguiente entrada algunas fórmulas y sinergias útiles para los problemas más habituales en la etapa infantil...















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