Todos los años después del inicio del curso escolar aparecen de nuevo como la plaga que son.  Y las madres corremos desesperadas a la tienda, farmacia, o al botiquín de remedios naturales como es mi caso. Nadie quiere los piojos en casa, o en la cabeza de su hijo mejor dicho... El año pasado dí con una fórmula, que nos funcionó a la perfección para prevenir, y comprobé que, incluso compartiendo tiempo y juego con niños infectados por esta plaga, mi hijo salió inmune a esta temida agresión.  Así que este año, que nada más empezar el curso ya nos encontramos con la situación, corrí a la libreta de notas y recetas con aceites esenciales y repetí la fórmula que, además deja un aroma agradable a hierbas frescas y limón.  Mi hijo me lo pide cada mañana antes de salir de casa y a modo de colonia en un frasco con tapón difusor  le rocío por encima de su cabeza - sobretodo la nuca, el cuello, detrás de las orejas y la coronilla- . Antes de pasaros la receta aroma ter...